jueves, 6 de julio de 2017

Violencia de género en redes sociales: un delito con castigo





Violencia y un teléfono. Violencia y una computadora. Violencia y un mensaje de texto. No parece haber relación. Pero, la hay. A algunas mujeres chatear les ha costado la vida; a otras, su reputación. El mundo virtual y el real tienen sus amenazas y, por suerte, también sus castigos.
Ramona Suárez tiene un salón de belleza en su casa de un barrio de la zona norte de Santo Domingo. Aprovechaba los momentos de ocio para interactuar con clientas, familiares y amigos por Facebook.
A Ramona (nombre ficticio) su hijo adolescente le enseñó a usar esta red, creándole una cuenta, y, en pocos meses, ya la estilista tenía agregada una gran cantidad de personas. Lo que nunca pasó por la mente de esta mujer, de 34 años, es que su vida se vería amenazada por participar en las redes sociales.
Y es que las redes sociales han venido a revolucionar la comunicación. Con solo un clic la persona puede establecer contacto con familiares y amigos, o  enterarse de los últimos acontecimientos sin importar dónde suceden.
Pero, ¿por qué la mujer está en desventaja con el uso de la tecnología?
Ramona ya no figura entre los 3.5 millones de dominicanos y dominicanas, que según algunas mediciones, usan Facebook. Su esposo, quien detesta el uso de los aparatos tecnológicos, llegó recientemente a la casa, le arrebató el teléfono celular, la golpeó  y la amenazó de muerte con un puñal si volvía a verla chateando.
Ella agradece a Dios estar con vida y, sin tomar ninguna acción para protegerse, como acudir a la justicia, ha optado por no acceder a  Internet. 
Así como Ramona hay miles  de dominicanas que sufren amenazas por recibir o enviar mensajes de texto. Otras son acosadas, hostigadas  y chantajeadas por las redes sociales. Pero en el país no hay estadísticas oficiales que indiquen la cantidad de mujeres que sufren este tipo de violencia.
A Facebook, Twitter, Instagram, así como la aplicación de  mensajería de texto y audio WhatsApp se puede acceder hasta de forma gratuita si hay zona wifi, y son precisamente los medios usados con más frecuencia para violar los derechos de las mujeres y dañar reputaciones.
En Santiago, se produjo un hecho que creó consternación. Un hombre, identificado como Ángel Vásquez, mató a tubazos a su pareja embarazada, Leidy Miguelina Peña Colón, de 30 años, frente a sus tres hijos, porque ella  se negó, supuestamente, a mostrarle un mensaje que había recibido en un teléfono celular.
El acoso nos afecta a todos
Según un estudio publicado por  Pew Research Center, en EE.UU. el 40% de usuarios de Internet son víctimas de acoso en línea.
Ese centro de investigaciones con sede en Washington, D.C., que brinda información sobre problemas, actitudes y tendencias que caracterizan a los Estados Unidos y el mundo, dice que de los usuarios encuestados, el 27% dijo haber sido insultado, el 22% víctima de alguien que intentó a propósito avergonzarlo y el 8% acosado o físicamente amenazado. Un 6% reportó haber sido acosado sexualmente.
Los más vulnerables a convertirse en víctimas de esta clase de comportamiento en línea son los jóvenes de 18 a 19 años (65%) y las mujeres de entre 18 y 24 (25% han sido acosadas sexualmente), según el sondeo.
Consecuencias psicológicas
La violencia sicológica es la que más se sufre con el hostigamiento, amenazas, las campañas de descrédito o el chantaje por las redes sociales y las mujeres son las más vulnerables, en su mayoría adolescentes.
Natividad tenía 15 años cuando su novio subió a Facebook una fotografía de ella desnuda. Por mucho tiempo, fue el tema de conversación en su pequeña comunidad, ubicada al sur del país. Ella abandonó los estudios y, a sus 18 años, ha tenido varias parejas. “Ella está traumatizada”, cuenta una de sus tres hermanas. 
La psicóloga infanto-juvenil Roxana González dice que hoy en día cuando la fotografía de una joven, desnuda o en situación comprometedora, es subida a las redes sociales, se enteran todos los que están en su entorno, porque sus padres, vecinos, amigos, compañeros de clase o de trabajo  tienen acceso a Internet, entonces, sufre la familia.
Esta forma de violencia,  sobre todo en las adolescentes, provoca un daño terrible a su autoestima: una sensación de ansiedad las invade. Hasta sufren ataques de pánico cada vez que salen a la calle, porque temen que las van a reconocer por las fotos o por lo que se ha publicado de ellas.
La especialista propone, en esos casos, trabajar con toda la familia. “Cuando su reputación ha sido dañada hay que trabajar para volver a crear esa autoestima perdida. Orientarlas para que tengan cuidado con lo que graban y las fotografías que se toman”.
Dice que ha tenido casos en donde las afectadas han tenido instintos suicidas y “gracias a Dios no pasó”.  De ahí que destaca la importancia del apoyo de la familia y de que los agresores sean sometidos a la justicia para que no vuelvan a cometer ese delito.
Las fotografías no siempre son colgadas a las redes sociales por las parejas o exparejas. Otros “hackean” las cuentas de Internet, suplantan identidades y utilizan otras maniobras ilegales para dañar la reputación, a veces, de su propia familia.
Este delito tiene prisión
Aunque muchos lo ignoran y no hacen uso de la justicia para castigar a los agresores cibernéticos, en República Dominicana está la Ley No. 53-07 sobre Crímenes y Delitos de Alta Tecnología que  contempla sanciones que van desde tres meses de prisión hasta los diez años, dependiendo de la gravedad del hecho, tanto para el que comete el delito, como para el cómplice, pudiendo ser condenado por homicidio cuando se llega a provocar la muerte de una persona. 
Esta legislación en el artículo 12, “Atentado contra la Vida de la Persona”, dice que se sancionará con las mismas penas del homicidio intencional o inintencional, o la provocación de muerte de una persona cometida utilizando sistemas de carácter electrónico, informático, telemático o de telecomunicaciones, o sus componentes.  
El chantaje, que es muy recurrente, ya que muchas personas piden dinero o sexo para no publicar determinadas informaciones o fotografías, conlleva prisión de uno a cinco años y multas de diez a 200 salarios mínimos. Esta forma de violencia es conocida en algunos países como “gooming”. 
El artículo 17, que castiga el robo de identidad, establece prisión de hasta siete años, igual que la difamación e injuria pública por medios electrónicos que tiene de tres meses a un año la primera y hasta cinco años la última.
Acompañamiento legal y sicológico
El Ministerio de la Mujer, a través del Departamento de No Violencia,  que acompaña con asistencia legal y sicológica, tiene en la actualidad varios casos en los tribunales de mujeres que han recibido amenazas, hostigamientos y acoso por las redes sociales.
Según cuenta la abogada Sony Cepeda, además de una violación a la ley 53-07, este tipo de violencia es castigada por la ley 24-07 sobre Violencia Intrafamiliar y contra la Mujer.
Dice que ese tipo de denuncias es constante, y que ese ministerio ha logrado apresamiento, órdenes de alejamiento y procesos abiertos con personas que han cometido el delito y han salido del país.
Pide a las víctimas no abandonar el proceso en la justicia para lograr las sanciones correspondientes y  así evitar que el victimario vuelva a incurrir en el delito cibernético.
La experta recomienda a las agraviadas poner la denuncia en las fiscalías y acudir con los mensajes de textos, los emails  y todas las pruebas que poseen para que el ministerio público pueda validarlos con el Departamento de Investigación de Crímenes y Delitos de Alta Tecnología (Dicat).
¿Quién persigue este delito?
Las investigaciones de los casos y el sometimiento a la justicia de las personas involucradas en delito de alta tecnología es una responsabilidad del Departamento de Investigación de Crímenes y Delitos de Alta Tecnología (Dicat), el cual tendrá oficiales de enlace de la División de Investigación de Delitos Informáticos (DIDI) del  Departamento Nacional de Investigaciones del Ministerio de Defensa y la Dirección Nacional de Control de Drogas, según lo establecido en la ley 53-07.  El Dicat tiene su cuenta de Twitter @DICATPN
El ministerio público creó la Procuraduría Especializada contra Crímenes y Delitos de Alta Tecnología, cumpliendo con esta disposición legal, y según cuenta su titular John Henry Reynoso Ramírez, cuando tienen casos de violencia contra la mujer, a través de la tecnología, le dan el apoyo necesario a la Procuraduría General para Asuntos de la Mujer.
Frecuentemente el Dicat da a conocer el apresamiento de personas que violan esta legislación, con la suplantación de identidades,  amenazas por las redes sociales que en algunos casos se materializan, como el chantaje y otros.
Citamos algunos casos dados a conocer por el Dicat. En Santiago fue desmantelado un centro de servicio de pornografía por Internet que operaba en la avenida Las Carreras de esa ciudad, y arrestaron a un estadounidense, una colombiana, 16 dominicanas y cinco dominicanos.
Otro caso es el apresamiento de una pareja de hermanos acusados de difundir imágenes difamatorias a través de la red social Instagram contra más de 30 personas, entre ellas funcionarios y otras figuras públicas.
Integran la pareja Mariana Rodríguez Fernández, quien al momento de ser ubicada y detenida, se encontraba en compañía de su hermano Navil Rodríguez Fernández. Ambos son investigados con relación a la creación de la cuenta de instagram “Bochinchando del 1 al 8”.
Se destaca que personalidades de la vida artística han sido víctimas de este delito y sus casos han sido resueltos y dados a conocer a los medios de comunicación, como, por ejemplo, el cantante urbano Manuel Baret Marte, “Vakeró”, que  utilizó su cuenta en la red social Twitter para denunciar que un hombre se hacía pasar por él en Facebook y pedía a sus seguidoras que se desnudaran.
Mozart La Para fue otro cantante afectado por este delito, ya que un hombre que se hizo pasar por él en la red social Facebook mantuvo raptada a una mujer a la que obligó presuntamente a sostener relaciones sexuales.
También  la comunicadora Nashla Bogaert  presentó en la Fiscalía del Distrito Nacional una denuncia contra todos los que divulgaron vía Internet unas fotografías en las que ella aparece desnuda.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Más de dos millones de dólares por un sombrero de Napoleón en una subasta

  Un bicornio negro que perteneció a Napoleón I se adjudicó este domingo en una subasta en Francia por 1,93 millones de euros (unos 2,1 mill...