¿De qué color pintas
tu vida y cada día de ella? ¿Sabías que tu color favorito dice mucho de cómo
eres y, además, puede estar influyendo en tu éxito o en que no estés logrando
los objetivos que deseas? Así como lo lees: los colores impactan en las
personas de formas distintas, evocando emociones y puede ser que de la manera
que vistes envíe un mensaje subliminal, congruente o distante, a lo que deseas
reflejar.
El color con el que te
vistes dice mucho de tu personalidad, influye en tu estado de ánimo y en la
forma en que los demás te perciben y te tratan. Para entenderlo mejor, te
expongo a continuación la forma en que, de acuerdo a los psicólogos, la mayoría
de las personas responden a los distintos colores:
El negro representa el poder,
la elegancia, la formalidad y el misterio. Es el color más enigmático y se asocia al miedo y a lo
desconocido. Representa también autoridad, fortaleza, intransigencia. También se asocia al prestigio
y la seriedad. Aunque muchos le asocian con que produce un efecto adelgazante y es elegante,
el negro puede hacer que quien lo usa sea percibido como una persona distante y
dominante.
El blanco se asocia a la luz, la bondad, la inocencia,
la pureza. Se le considera el color de la perfección. El blanco significa
seguridad, pureza y limpieza. Puede representar un inicio afortunado.
El color azul denota tranquilidad, autoridad, confianza
y lealtad. Es el principal color transmisor de poder y se suele asociar con la
estabilidad y la profundidad. Representa además la sabiduría, la inteligencia,
la fe y la verdad
El marrón comunica credibilidad y estabilidad. Este es
el color de la tierra y de la abundancia en la naturaleza. Además, es un
excelente color para transmitir información, ya que crea un ambiente neutral
para discusiones abiertas.
El café es asociado con acciones ignorantes o egoístas.
Suele considerárselo un color “negativo” en general, sobre todo si es más
oscuro.
El beige y el canela, como el marrón, son
colores de tierra relajantes, reductores del estrés, que invitan a la
comunicación. Muchas veces percibidos como poco enérgicos y pasivos, éstos son
los colores para usar para reconfortar a otros o para transmitir información.
El gris, al igual que los colores que lo componen, es una
mezcla de positividad con negatividad. De pureza y suciedad. Siempre alude a lo
indefinido, desabrido, ni bueno ni malo, lo cual puede resultar positivamente
en que se tiene la opción de intentar cambiar. Si deseas lucir autoridad de un
modo menos opresivo que con el negro, opta por el gris. Es una excelente
elección.
El rojo denota calor, peligro, poder, pasión y
fortaleza. El rojo es el color más intenso en lo emocional, y estimula a una
respiración y ritmo cardíaco más rápidos. Cuando se lo usa como color secundario,
puede motivar a las personas a tomar decisiones rápidas y a incrementar las
expectativas. Sin embargo, puede realzar las emociones durante negociaciones y
confrontaciones, por lo que es inteligente evitarlo en grandes cantidades
cuando enfrentes estas situaciones.
El anaranjado, como el rojo, estimula las emociones fuertes.
Combina la energía del rojo con la felicidad del amarillo. Se le asocia a la
alegría, representa el entusiasmo, la felicidad, la atracción, la creatividad,
la determinación, el éxito, el ánimo y el estímulo. Las personas que usan
anaranjado son percibidas como de fuerte personalidad.
El amarillo inspira
un amplio rango de emociones, desde alegría y esperanza hasta precaución,
decadencia y celos. Realza la concentración. Sin embargo, las personas pierden
sus estribos más a menudo en habitaciones amarillas que en espacios de otros
colores, y los bebes llorarán más en ambientes pintados de amarillo. Éste es el
color más difícil de asimilar para el ojo, por lo que puede saturar si es usado
de más. El amarillo estimula la actividad mental y genera energía muscular.
El verde es
un color relajante y refrescante. Tiene una fuerte relación a nivel emocional
con la seguridad y un gran poder de curación. Es el color más relajante para el
ojo humano y puede ayudar a mejorar la vista. ¿Quieres que los demás se sientan
a gusto a tu lado? Entonces usa verde en tonalidades medias u oscuras.
El púrpura aporta
la estabilidad del azul y la energía del rojo. Simboliza lealtad, riqueza,
poder, lujo y ambición, pero también sensibilidad. Es además el color de la
pasión y el amor. El color púrpura también está asociado con la sabiduría, la
creatividad, la independencia, la dignidad. También representa la magia y el
misterio
El rosado es
uno de los colores más poderosos, ya que significa pureza en acción. Este color
es emocionalmente relajado e influye en los sentimientos convirtiéndolos en
amables, suaves y profundos. Nos hace sentir cariño, amor y protección. También
nos aleja de la soledad y nos convierte en personas sensibles.
Pero esto del color,
no se limita a tu guardarropa, es una estrategia que se utiliza en logos de
empresas y hasta en colores de oficina para atraer clientes o alejarlos (en la
mayoría de casos sin saber), lo mismo que para tener una adecuada energía o no
en tu casa.
Según leí, el Feng
Shui, del cual no soy especialista pero te comparto de lo que investigué, los
colores realmente funcionan para guiar las tendencias de lo que deseemos para
nuestro presente y futuro.
El feng shui, se estudia
dentro de las aplicaciones del yin y yang, siendo el rojo el color más yang y
el violeta el más yin. El rojo es lo más activo y el violeta el más pasivo para
la activación de la energía de prosperidad.
Por ejemplo, algunas
personas siempre tienen preferencia por el negro o el gris, sin saber que esto
disminuye la energía de prosperidad. Si cambiaran esta tendencia, su vida puede
mejorar significativamente.
Combinar colores no
solo te puede llevar a desarrollar un lugar agradable para vivir sino que puedes
sacar partido al conocimiento de las energías que contiene cada uno de ellos.
Por ejemplo, los
expertos en la material aseguran que si colocas el rojo con predominancia en
los colores de las paredes, todos los ambientes se activarán con energía. Este
color influirá en todos los que habiten esta casa. El rojo, junto con el
dorado, es la máxima energía de prosperidad.
De lo que se trata es
que puedas ir controlando la energía que deseas poner a tu casa u oficina, ya
que un exceso de rojo podría incrementar las discusiones o la actividad, cuando
también necesario tener momentos de calma e inactividad en los hogares.
Entonces, es necesario
saber dosificar los colores. No se recomienda pintar los dormitorios de colores
azules, celestes, violetas, grises, negros o diversos colores, ya que puede
limitar la prosperidad de los duerman en ellos.
Los colores ideales,
que los expertos, en general -esto ya no es hablando específicamente del feng
shui ni de la personalidad- recomiendan para una oficina son:
Azul. Indicado para oficinas y sitios estresantes
como salas de espera médicas, donde se busca calmar el estado de ánimo de los
ocupantes. Es apropiado para quienes buscan creatividad y trabajan
individualmente, como los escritores.
Verde. Favorece la creatividad, concentración y
relajación. Este color es útil para agencias de publicidad y para zonas en las
que laboran diseñadores o músicos.
Amarillo. Estimula la actividad cerebral y la
comunicación. Es recomendable para lugares en los que los trabajadores buscan incrementar
su energía.
Marrón y beige. Los tonos terrosos tienen efectos relajantes
y pueden usarse para contrarrestar el estrés.
Naranja. Promueve la interacción con los demás y la
comunicación de manera informal. Los tonos durazno y terracota son
recomendables para los trabajos en los que se requiere, escuchar, negociar y
conciliar.
Blanco ostra o no
brillante. Ayuda a la
objetividad y al trabajo intelectual. Además crea un ambiente de orden, calma y
control.
Si tu casa o empresa
tiene los colores correctos, y tú vistes colores adecuados, progresarás, de
otro modo podrías vivir contra corriente.
Y recuerda: ¡Sonríe,
agradece y abraza tu vida!
Sobre todo: ¡a
despertar a la vida, gente! Para VIV
FUENTE:huffingtonpost.com
