Vilnius (Lituania)
El encendido del Árbol de Navidad de la Plaza de la Catedral de la Ciudad Vieja de Vilnius es una tradición que congrega a locales y visitantes en la capital de Lituania. Se trata de una enorme estructura de metal cubierta de ramas de abeto y restos de trabajos forestales de poda, adornada con 70.000 bombillas que convierten al conjunto en uno de los árboles navideños más brillantes de Europa. Tanto que los pasajeros pueden distinguirlo fácilmente desde su avión antes de aterrizar en el aeropuerto. Destellará hasta el 7 de enero.
Copenhague (Dinamarca)
Los famosos Jardines Tivoli con sus montañas rusas, sus carruseles y sus espectáculos, constituyen uno de los grandes epicentros de la Navidad de Copenhague. Este parque de atracciones, que funciona desde mediados del XIX en el corazón de la capital danesa, se llena de luces para la ocasión y alberga un mercado con tiendas llenas de regalos y artículos navideños, exhibiendo su lago transformado en una bonita pista de patinaje sobre hielo. Hasta el 31 de diciembre mantiene un programa festivo que incluye impresionantes festivales de fuegos artificiales el 25, 26 y 30 de diciembre, y en Año Nuevo.
Durante la Navidad 2017-2018, la iluminación de la calle de Alcalá desde la plaza Cibeles a la Puerta de Alcalá evocará el cielo de Madrid cubierto de estrellas; la de la calle de Serrano representará distintos tejidos, “en homenaje a la calle de la moda”, según describen desde el Ayuntamiento. Este año aumentaron los emplazamientos alumbrados pero el meollo festivo sigue estando en los alrededores de Alcalá, Gran Vía, Sol y la Plaza Mayor, con su tradicional mercadillo. El Naviluz, el Bus de la Navidad, recorre las principales calles del centro y permite disfrutar del espectáculo.
París (Francia)
Más 'Ciudad de la Luz' que nunca por Navidad, París hace brillar sus principales monumentos –Ópera Garnier, Torre Eiffel, Inválidos, el Louvre– desde mediados de noviembre. Hasta el 8 de enero estarán encendidas las emblemáticas luces de la avenida de los Campos Eliseos, desde el Arco del Triunfo hasta la plaza de la Concordia, con una lluvia de estrellas fugaces decorando sus 400 árboles. A ellas se suman las de la avenida Montaigne, la plaza Vendôme y el barrio de Montmartre... Un 'tour' en autobús descubierto las recorre, con bebida caliente y manta de cortesía incluidas
Londres
“Admira las luces de Navidad de Londres”, anima la web de Turismo de la capital británica.. Las famosas de Regent Street y Oxford Street; las que resplandecen en las comerciales Carnaby y Bond Street; las que integran las decoraciones festivas de Covent Garden; las que titilan en el Árbol de Navidad de Trafalgar Square, y las que dibujan figuras brillantes inspiradas en la estatua de Anteros, el dios griego del amor correspondido, en Picadilly. Hasta el 31 de diciembre, The Shard, el rascacielos más alto de la Unión Europea (hasta ahora), ilumina el horizonte con su espectáculo lumínico.
Niza (Francia)
La Villa de Noel de Niza reconstruye un pueblo de montaña como de postal navideña en pleno centro, en el Jardín Alberto I: unas setenta cabañas que ofrecen productos de artesanía local, regalos y especialidades gastronómicas de la zona como la 'socca'; una noria; un tiovivo; una pista de patinaje. Todo profusa y festivamente alumbrado con bombillas, con villancicos como banda sonora. Para Fin de Año esta ciudad de la Costa Azul francesa ha preparado una Navidad cósmica: una iluminación temática inspirada en la conquista del espacio que encenderá plazas y avenidas, convirtiendo el famoso Paseo de los Ingleses en todo un espectáculo de luz y color.
Bruselas (Bélgica)
La noria de la plaza de Santa Catalina observa iluminada cómo Bruselas y sus principales monumentos comienzan a brillar ya desde finales de noviembre. La capital belga vive sus Placeres de Invierno (Plaisirs d'hiver), nombre del mercado navideño que año tras año ha ido extendiendo sus casetas por el centro de la ciudad: este 2017 arrancó el 24 de noviembre con el encendido del enorme Árbol decorado de la Gran Plaza, que cada noche ofrece un espectáculo audiovisual; terminará el 31 de diciembre. La noria, junto con la pista de patinaje al aire libre, seguirá en marcha hasta el 7 de enero.
Berlín (Alemania)
Varias empresas organizan 'tours' para conocer la iluminación festiva de Berlín. Brillos, adornos y juegos lumínicos por doquier. El Weihnachtszauber, el mercado navideño de la plaza Gendarmenmarkt, uno de los más populares de la capital alemana, aparece como una pequeña ciudad de carpas rematadas por más de 1.000 luces. Su ambiente acogedor atrae cada año a unos 60.000 visitantes de todo el mundo y es uno de los platos fuertes de la Navidad berlinesa junto con el mercado en el centro histórico de Spandau, el más grande, o el nostálgico del Palacio de la Ópera, con artesanos de todo el mundo, atracciones de feria y gastronomía típica.
Málaga (España)
Todos los días una multitud se reune en la plaza de la Constitución (con uno de los cuatro árboles de 18 metros de altura instalados) y la calle Larios de Málaga para disfrutar de un espectáculo navideño de luz y sonido: destellos luminosos al ritmo de Christmas Festival, de The Boston Pops Orchestra; Wizards in Winter, de Trans-Siberian,
Barcelona
El 23 de noviembre Barcelona vivió un emotivo encendido de su alumbrado navideño en la Rambla (en la foto) para rendir homenaje a las víctimas del atentado terrorista del 17 de agosto de 2017. Desde ese día y hasta el 6 de enero, la Ciudad Condal resplandece. Carrer Rosselló, Gran Vía, Aragó, la Torre Agbar. En total, más de 100 kilómetros de calles iluminados; un epicentro festivo localizado en la plaza de Catalunya, con actividades, talleres, espectáculos, arte urbano; una feria navideña, la de Santa Lucía, en Pla de la Seu, en la avenida de la Catedral, igualmente colorida y luminosa.
Praga (República Checa)
La cuidada y profusa decoración lumínica juega un papel clave en la atmósfera especial de los mercadillos navideños de Praga, que figuran entre los más bonitos del mundo y estarán abiertos hasta el 6 de enero. El de la Plaza de la Ciudad Vieja está presidido por un enorme Árbol traído cada año de un rincón distinto de la República Checa; en su montaje se han utilizado 12 kilómetros de cables y 121.000 de puntos de luz que bailan en espectáculos diarios de animación musical. El puente pasarela ubicado en mitad de la plaza se ha ampliado para permitir a los visitantes una vista panorámica del mercadillo.
Tbilisi (Georgia)
Tbilisi, geográficamente en Asia, capital de Georgia, país euroasiático aunque histórica y culturalmente considerado parte de Europa, enciende cada año en su Plaza de la Libertad uno de los árboles de Navidad más espectaculares del mundo. Aunque en realidad no es un árbol sino un elegante manto blanco formado por miles de bombillas que decoran la altísima columna sobre la que se alza una estatua de San Jorge a caballo matando al dragón, símbolo de la libertad e independencia de la nación georgiana. Se asemeja a un enorme abeto iluminado, permanece hasta Año Nuevo y es el escenario principal de las celebraciones navideñas de la ciudad. En la foto, iluminación para Año Nuevo en la avenida Rustaveli.
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