En lo que va de este mes la policía en la agitada región occidental de Xinjiang China, ha desarticulado 23 grupos terroristas y extremistas religiosos y arrestado a más de 200 sospechosos, reportó la prensa estatal el lunes.
Es el primer anuncio de un alto número de arrestos desde que un ataque la semana pasada en la capital de la región, Urumqui, dejó un saldo de por lo menos 34 muertos. Las autoridades lanzaron después una vasta operación contra terroristas y extremistas, aunque las cifras sobre las últimas detenciones reflejan todo el mes de mayo.
La agencia noticiosa oficial Xinhua citó al buró regional de seguridad como fuente de la información. El portal noticioso Tianshan, administrado por la rama regional del Partido Comunista, reportó también los arrestos y redadas, que ocurrieron en las ciudades de Hotan, Kashgar y Aksu.
Xinhua dijo que la policía había capturado a un número no precisado de sospechosos con edades entre los 20 y los 30 desde el viernes. Dijo que los sospechosos habían aprendido por medio de videos en internet cómo hacer explosivos y cómo entrenarse. Habían usado mensajes de texto y los medios sociales para hablar de cómo producir explosivos y diseminar la idea de una guerra santa. Dijo que la policía confiscó más de 200 artefactos explosivos.
Muchos de los musulmanes de la etnia uigur en Xinjiang dicen que sufren discriminación por parte del gobierno y de la mayoría étnica han. Ataques recientes atribuidos a extremistas uigures se han vuelto más atrevidos.
En el ataque del jueves, dos camiones arremetieron contra muchedumbres en un mercado en Urumqui y los ocupantes lanzaron explosivos desde las ventanillas. Fue el mayor número de víctimas en un solo acto de violencia relacionado con las tensiones en Xinjiang en tiempos recientes.
En abril, dos atacantes suicidas detonaron sus explosivos a la salida de la estación de trenes en Urumqui, matándose a sí mismos y a otra persona. Otras ocho personas atacaron a pasajeros con cuchillos, hiriendo a 79.
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